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Mima tus dedos con la crema de manos de kai. Envenenada con el aroma de flores blancas embriagador de la fragancia clásica de kai, esta lujosa crema de manos ofrece una nutrición suprema gracias a la mezcla de manteca de karité, aceites de cártamo y girasol, aloe vera y extracto de manzana.
Los detalles
- Fórmula ligera y vigorizante ideal para pieles secas y agrietadas.
- Sin parabenos, sulfatos, ftalatos, fosfatos ni gluten
- Producto vegetariano producido sin crueldad animal
- 2 fl oz
- Nº artículo Revolve KAAI-WU4
- Nº de estilo del fabricante k2011
- El paquete y los materiales reales pueden variar. Por favor, lee las etiquetas, los avisos y las instrucciones antes del uso.
Water/Aqua, Glycerin, Cetearyl Alcohol, Butyrospermum Parkii (Shea Butter), Hydrogenated Palm Kernel Glycerides, Helianthus Annuus (Sunflower) Seed Oil/Helianthus Annuus, Ethylhexyl Palmitate, Carthamus Tinctorius (Safflower) Seed Oil/Carthamus Tinctorius, Dimethicone, Fragrance/Parfum, Aloe Barbadensis (Aloe Vera) Leaf Juice/Aloe Barbadensis, Ceteareth -20, Xanthan Gum, Pyrus Malus (Apple) Fruit Extract/Pyrus Malus, Hydrogenated Palm Glycerides, Coco-Glucoside, Coconut Alcohol, Phenoxyethanol, Caprylyl Glycol, Ethylhexylglycerin, Hexylene Glycol, Hexyl Cinnamal, Benzyl Benzoate, Benzyl Salicylate, Butylphenyl Methylpropional, Citronellol, Geraniol, Linalool, Hydroxycitronellal. Disclaimer: Ingredients are subject to change at the manufacturer's discretion. For the most complete and up-to-date list of ingredients, refer to the product packaging.
Gaye Straza, en su juventud, pasaba las vacaciones en los trópicos. Tras años evitando los perfumes de la corriente dominante que no eran de su rollo, Straza decidió crear un aroma para ella misma que personificara las exóticas flores blancas que le encantaban. Durante varios meses trabajó sin descanso con una pequeña tienda de perfumes desarrollando lo que ahora conocemos como kai. La primera vez que Straza se lo puso, una editora de belleza la paró en medio de Madison Avenue en Nueva York para preguntarle dónde podía comprar la fragancia. Era un buen presagio de lo que iba a pasar. Poco después de aquello, Straza comenzó a vender la fragancia en su propia boutique de moda de lujo de Malibú y kai tomó vida propia. Hubo tanta demanda que Straza vendió la boutique en 1999 para desarrollar una línea entera y lanzó su propia empresa llamada kai.